Cristian Carrizo tiene 19 años recién cumplidos y su historia merece ser contada. Hace 10 días que comenzó la iniciativa, gracias al empuje de un amigo y su novia, de vender café en la calle, pero de una manera distinta.
Todos los días, viaja en colectivo desde Villa Muñiz hasta Belgrano al 200. Allí con una bicicleta y con un armado especial de su carro, brinda la posibilidad de que ante las bajas temperaturas, la gente tenga la opción de tomarse un café al paso.
El joven sufrió hace un año la pérdida de su abuela, la que lo crió desde chico y fue uno de los motivos por los que tuvo que dejar la escuela, asistía a la Escuela N° 29. Le faltan dos años para egresar de la secundaria que ya tiene pensado hacerlo con el plan FINES.
Según cuenta Cristian, que previamente había hecho “changas” de albañil, tuvo que tomarse algunos meses para aprender sobre la vida cafetera. “Lo único que se necesita es café, agua y muchas ganas”.
Muchos de los que compraron su café ya le han dicho que se mude con la “bicicleta y su carro” hacia otro punto de la ciudad, para tener mayor flujo de personas y posibles nuevos clientes. Por ahora está de 9 a 17 hs. en Belgrano al 200. Igualmente en sus redes de Café Urbano, ira mencionando por dónde va a estar cada día. Una forma de ganarse la vida dignamente.
