La carne vacuna cerró diciembre pasado sin variaciones en sus precios y finalizó 2022 con una suba del 42,4%, según un relevamiento del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (Ipcva).

La producción de carne vacuna se incrementó, pero los precios se mantuvieron bajos y los productores y feedlots tuvieron pérdidas millonarias. El gobierno no permite la venta al exterior de algunos cortes populares y la inflación general también contribuyó a la baja del poder adquisitivo. Los precios variaron entre diferentes sectores socioeconómicos, con mayor baja en los de nivel alto y mayor aumento en los de nivel medio.

Jerónimo Echeverry, integrante del CREEBBA, le dijo a Canal Siete “la carne venía teniendo variaciones muy bajas en los últimos meses y de golpe en un mes se incrementó más de un 7%”.