Hasta el momento, la justicia no pudo confirmar que los cuatro chicos de Villa Delfina que se encuentran internados en el Hospital Municipal hayan sido víctimas de maltrato físico.
Según informaron las fuentes consultadas por Canal Siete, los pequeños no presentaban marcas de golpes. Tampoco se constataron restos de materia fecal en la boca de una de las nenas, como había señalado ante los medios uno de los vecinos.
A propósito de este testimonio, desde la fiscalía señalaron que el vecino que declaró que los chicos eran golpeados y obligados a comer caca, no ratificó esas declaraciones ante la justicia.
Más allá de estos datos preliminares, la fiscalía ordenó que se realicen pericias más profundas sobre los menores para descartar cualquier tipo de malos tratos que hayan recibido en el pasado.
La investigación la lleva adelante el fiscal Marcelo Romero Jardín. En la causa se intenta determinar los padres incurrieron en el delito de “abandono de persona”. Según confiaron las fuentes consultadas, hasta el momento no hay elementos para determinar ningún delito.
En la vivienda, más allá de las suciedad y las malas condiciones para habitarla, se encontró un medicamento para suministrarle a la pequeña que tenía fiebre y una bebida isotónica para hidratarla. Esos datos hacen pensar a los investigadores que los padres estaban preocupados por la salud de los chicos y estaban intentando asistirlos para que no se deshidraten ante el cuadro de gastroenteritis que tenían.
De confirmarse estas situaciones, se trataría de un caso de vulnerabilidad social y no de una investigación penal. Por lo tanto intervendrían para la asistencia de la familia el servicio local de promoción y protección de derechos y los tribunales de familia.