El Concejo Deliberante está evaluando un proyecto presentado por la Municipalidad para confiscar motocicletas que excedan los límites de ruido permitidos.

El concejal Adrián Jouglard del bloque Juntos, en diálogo con Canal Siete, explicó que existe una ordenanza, pero el proceso de retención de vehículos y la realización de pruebas con un decibelímetro requiere la presencia de personal de Saneamiento Ambiental, que generalmente no está presente durante los operativos.

Además, están buscando la posibilidad de confiscar los vehículos incluso cuando estén estacionados, no solo por cuestiones de ruido, sino también si carecen de la iluminación adecuada, espejos, matrícula, etc. Esto permitiría agilizar los procedimientos y sería una herramienta de prevención, ya que evitaría que los conductores evadan los operativos.

“Bahía Blanca tiene cerca de 60 mil motos, y muchas no están en regla, no solo por ruidos molestos, sino por no tener los elementos indispensables que hacen a la seguridad del tránsito”, dijo Jouglard.