Los vecinos del Barrio Viajantes del Sur expresaron su preocupación ante la creciente ola de robos que los afecta. Para muchos, salir a trabajar se ha convertido en un acto de incertidumbre, ya que constantemente se enfrentan a la posibilidad de ser víctimas de la delincuencia.
“Nos roban lo poco que tenemos”, lamenta uno de los vecinos. La falta de iluminación en las calles y la presencia de descampados han convertido al barrio en un blanco fácil para los delincuentes, que operan sin temor incluso durante el día.
A pesar de los reclamos de los vecinos por mayor seguridad, la presencia policial es escasa, y los patrulleros rara vez son vistos en la zona.
“Ya no sabemos qué más hacer“, admitió otro vecino. Las medidas de seguridad como alarmas, cámaras y cercos no parecen ser suficientes para disuadir a los delincuentes, quienes continúan con los robos con total impunidad.
Los vecinos del sector sienten que los delincuentes los tienen “de punto”, observando y esperando el momento adecuado para atacar.
A pesar de la desesperación y el miedo, los vecinos mantienen la esperanza de que las autoridades tomen medidas concretas para abordar la inseguridad. Exigen un mayor patrullaje, iluminación adecuada y una respuesta policial más eficaz ante los casos de robo.