Durante el temporal que azotó Bahía Blanca, Lucas Bruna y Nicolás Álvarez rescataron a 40 personas utilizando una moto de agua. Ante la desesperación de los vecinos atrapados por la inundación, ambos organizaron un operativo improvisado y trabajaron durante ocho horas ininterrumpidas.
Mientras Nicolás maniobraba la moto, Lucas ingresaba a las casas inundadas, rompiendo vidrios o persianas para sacar a los afectados. Con la llegada de más jóvenes del barrio, lograron coordinar mejor los rescates hasta que, recién a las 19, arribaron las fuerzas oficiales de auxilio.
El testimonio de Lucas se viralizó en redes y generó un fuerte reconocimiento en la comunidad. Su historia refleja el valor de la solidaridad en momentos de crisis y la rapidez con la que los vecinos reaccionaron para ayudar antes de la llegada de los equipos de emergencia.
