El mercado del gas envasado (GLP) en la Argentina dio esta semana un nuevo giro: se desregularon por completo los precios. La resolución publicada en el Boletín Oficial terminó de cerrar un proceso que venía gestándose desde el año pasado. Primero se redujeron subsidios, luego se abandonaron los precios máximos para pasar a precios de referencia, y ahora se eliminó incluso esa guía.
“Cada eslabón de la cadena comercial podrá fijar sus valores según sus costos, distancias y logística, como cualquier otro producto”, explicó Mario Brandizzi, titular de la distribuidora oficial de YPF Gas en Bahía Blanca. La Secretaría de Energía, a partir de ahora, conservará solo un rol de contralor en materia de seguridad, pero no intervendrá más en la regulación de precios.
La medida llega en medio de una ola polar que empuja la demanda de garrafas. En Bahía Blanca, la situación es crítica pero contenida. “Pudimos responder sin problemas porque ya veníamos preparados. El trabajo articulado con el municipio nos permite sostener el abastecimiento con el Plan Calor 2025, que asiste a 6.000 beneficiarios sociales”, señaló Brandizzi.
Este plan no sólo garantiza el acceso a garrafas con un sistema de tarjetas precargadas, sino que incluye entrega de frazadas, estufas eléctricas y camperas. Entre junio y agosto se distribuirán 18.000 garrafas domiciliarias. “Este año, la ayuda creció un 60% respecto al año pasado. Sumamos trazabilidad, seguimiento, geoposicionamiento de beneficiarios y diez estaciones de servicio más para entregar el producto en 24 horas”, detalló.
La demanda también se ajusta fuera del circuito social. Según Brandizzi, el uso habitual se incrementó entre un 10 y un 15% por la ola polar, pero se espera que se estabilice la semana próxima, cuando bajen las temperaturas. Y frente al nuevo escenario de precios libres, las familias buscan estrategias para economizar:
“El consumo ya no es solo con envío a domicilio. La gente se mueve, retira en depósitos o en estaciones de servicio. Una garrafa con envío ronda los $20.500; si sos beneficiario social, $18.500. Pero si la retirás en depósito, baja a $15.500. Cada uno elige según su bolsillo y sus posibilidades”, explicó.
