“Nos cansamos de esperar, esta calle está sin salida y sin solución”: reclamo de vecinos del Barrio Don Bosco

Vecinos del barrio Don Bosco, denuncian una situación crítica que se arrastra desde principios de enero, una pérdida de agua constante en la intersección de las calles Humboldt y Godoy Cruz, que ya provocó importantes daños estructurales en viviendas y comercios de la zona.

El problema no solo afecta a las instalaciones, con pisos quebrados, rajaduras en paredes y veredas, sino también a la vida diaria del barrio. Según relatan los vecinos, hace más de quince días que no pasa el camión recolector de residuos, lo que generó una acumulación de basura en plena vía pública. La calle, además, se encuentra intransitable.

“Estamos todos incómodos. Se rompieron nuestras casas y negocios, y además se suspendió el servicio de recolección”, relató una vecina. “El camión no entra porque la calle está en muy mal estado. Las bolsas se acumulan y nadie da una solución”.

Cansados de la falta de respuestas, los vecinos colocaron un cartel con la frase “Calle sin salida y sin solución” para visibilizar el abandono que sienten por parte de las autoridades municipales y provinciales.

Según testimonios, la empresa contratada para resolver la fuga de agua reconoce que no puede identificar el origen del problema. “Nos dijeron que la pérdida podría venir desde más arriba, pero mientras tanto sigue saliendo agua y el terreno cede”, explicó otro vecino.

Los frentistas aseguran que realizaron numerosos reclamos telefónicos, entregaron videos del problema e hicieron gestiones tanto ante ABSA como ante la municipalidad. Sin embargo, señalan que las respuestas son confusas y que las responsabilidades se transfieren de una entidad a otra, sin resolver la situación.

“En mayo me sacaron un árbol para trabajar sobre el caño. Dijeron que lo iban a arreglar, pero la pérdida sigue igual. Fui a ABSA y me mandaron a la municipalidad, en la delegación dijeron que era competencia de ABSA. Nadie se hace cargo”, denunció una vecina.

Además de los daños materiales, comerciantes afirman que la situación impacta en sus ventas, ya que muchos clientes evitan circular por la cuadra debido al estado de la calle.

“Los pisos del local están quebrados y la gente ya no entra. Perdemos plata todos los días por un problema que nadie quiere resolver”, afirmó el dueño de una ferretería.