Desde el 2 de enero, en la esquina de Humboldt y Godoy Cruz, una pérdida de agua mantiene en vilo a comerciantes y vecinos de la cuadra. Pese a las intervenciones de personal de ABSA, el problema nunca fue solucionado de manera definitiva.
Uno de los más afectados es el dueño de una ferretería de la zona, que asegura que la situación golpea de lleno a su negocio y a las más de 15 familias que dependen de él.
“Arreglaron gran parte de la pérdida, pero se ve que quedó filtrando. Sigue brotando agua, sigue la humedad y seguimos con el mismo problema dentro del negocio. Estamos sacando piso y volviendo a poner piso, haciendo reparaciones para poder seguir funcionando. Pero no sé hasta cuándo”, contó.
El comerciante también reconoció sentir temor por las consecuencias estructurales que puede tener la pérdida. “El miedo lo tengo latente, que un día venga y me encuentre una pared caída. Yo tengo gente trabajando y si a mí me pasa algo, ¿a quién le reclamo? ¿Quién me responde?”.
La problemática se extiende a toda la cuadra. Varios vecinos debieron mudarse y otros realizaron reparaciones costosas por su cuenta. Uno de ellos perdió el garage entero, que se derrumbó producto de la humedad. “Todo lo estamos resolviendo nosotros, con albañiles, con hormigón, con gastos que no nos corresponden. Estamos cansados, esto arrancó el 2 de enero y así sigue, sin respuesta”, agregó el dueño de la ferretería del sector.
Además del daño en las viviendas y comercios, la calle se encuentra en mal estado y representa un riesgo para el tránsito. “Tengo miedo cuando pasa un colectivo o un camión grande, porque se siente dentro del negocio. Hay pozos, hundimientos y de noche está todo oscuro. Pareciera que están esperando que pase algo más grave”, advirtió.
A la pérdida de agua se sumó en las últimas semanas otra complicación, un desborde cloacal a menos de una cuadra, lo que refuerza la sensación de colapso en la infraestructura del barrio.
