Carlos Mendoza, comerciante de Punta Alta, relató el dramático asalto que sufrieron decenas de compradores de la región en su regreso desde la feria de La Salada. El camión que trasladaba la mercadería fue interceptado y despojado por completo de los bultos que transportaba.
“Había mucha gente mayor, fue mucha angustia, varias señoras terminaron llorando. Fue algo muy terrible”, describió Mendoza, uno de los damnificados, quien aseguró haber perdido casi 2,8 millones de pesos en ropa y calzado que traía para abastecer su showroom.
El comerciante detalló que viajaba junto a su esposa y que cargó tres bultos con buzos, conjuntos y zapatillas. “El camión estaba lleno, se veía que había más de 80 bultos. Muchos viajamos con entre dos y tres millones de pesos en mercadería. Haciendo una cuenta rápida, solo en ese colectivo se perdió alrededor de 75 millones, sin contar las encomiendas que también transportaban”, explicó.
El viaje, según Mendoza, siempre se realiza con la misma operatoria, salida desde la región por la tarde, llegada a la feria de madrugada, compras hasta el mediodía y regreso con la mercadería en el camión de la empresa. “La empresa dice que hay custodia, pero jamás vimos un auto que acompañe. Siempre viajamos solos. Yo hace dos años que viajo y nunca había pasado nada parecido”, advirtió.
El comerciante señaló que el principal problema es la falta de seguridad en la operatoria. “Tenés un camión cargado hasta arriba de bolsas, manejado por una sola persona, circulando por zonas riesgosas como si no llevara nada. Las medidas de seguridad son mínimas”, cuestionó.
Mendoza reconoció que el episodio genera dudas sobre la continuidad de este tipo de viajes, “Nunca pasó que se pierdan diez bultos, ahora se perdió un camión entero. Uno empieza a pensar si es rentable seguir arriesgando tanto. El dinero siempre se maneja en efectivo, no hay transferencias ni facturas. Los recibos que te dan no valen nada”.
Entre los damnificados también había comerciantes de Bahía Blanca y de otras localidades de la zona. Según los testimonios, algunos habían invertido sumas millonarias, “Una chica contó que vendió su auto para comprar mercadería, otro hombre viajó con 9 millones de pesos. Fue desesperante”, recordó Mendoza.
El caso ya fue denunciado por los afectados, aunque persiste la incertidumbre sobre qué respuesta tendrán por parte de la empresa y de las autoridades.
