Martín Salaberry presentó su espacio político con un mensaje enfocado en Bahía Blanca y en la necesidad de superar la lógica nacional de enfrentamientos que, según él, no resuelve los problemas concretos de los vecinos.
“Vivimos en una ciudad deteriorada, abandonada. Lo vemos todos los días cuando transitamos por Bahía. Nuestro mensaje es claro, representar al vecino y poner en agenda los temas prioritarios, para que cada peso de los contribuyentes se destine a lo que de verdad importa”, señaló.
En ese sentido, hizo hincapié en la tragedia de la inundación y en las secuelas del temporal del año pasado como punto de inflexión. “Después de lo que pasó, cada peso tiene que ir a lo esencial. Y también necesitamos transparencia, honestidad y control del Ejecutivo. Esa es nuestra bandera”, subrayó.
Salaberry apuntó contra lo que definió como una “grieta falsa” entre libertarios y kirchnerismo, “Acá en Bahía es lo mismo, porque no rinden cuentas. Esa grieta no le habla al vecino. Lo que hace falta es una oposición auténtica, que tenga una agenda propositiva y que piense en lo cotidiano: el bache, la limpieza, los semáforos que no funcionan. Lo básico que hoy está abandonado”.
El dirigente presentó además a los nombres que lo acompañan, entre ellos Cecilia Borelli, médica oftalmóloga, y Federico Castoldi, director del INTA, a quienes definió como “vecinos con trayectoria y compromiso social”.
La actividad contó con el respaldo de referentes seccionales, como Andrés De Leo y los intendentes Martín Randazzo (La Madrid) y Franco Flexas (General Viamonte), quienes remarcaron la necesidad de luchar por más recursos para la región sur de la provincia.
“El vecino espera prioridades claras y gestión cotidiana. Nosotros vamos a ser su voz, frente a una política que se habla a sí misma y no escucha los problemas de la gente”, concluyó Salaberry.
