La bahiense Catalina Turienzo, de 19 años, se consagró este fin de semana campeona del mundo U21 de Fórmula Kite, revalidando el título obtenido en 2023 en Gizzeria, Italia. La competencia se desarrolló en Praia da Vitória, en el archipiélago de las Azores, Portugal, donde la argentina tuvo una actuación sobresaliente pese a afrontar condiciones extremas.
Turienzo celebró su tercer título mundial juvenil, esta vez en un escenario desafiante. “Terminar el año con mi tercer título mundial juvenil” es un logro que la llena de orgullo, aseguró. La bahiense corrió en olas de hasta cuatro metros y vientos intensos: “Fue un título que me costó sangre, sudor y lágrimas”, contó, al revelar que compitió la final recién salida del hospital y con puntos.
Turienzo destacó que este nuevo campeonato es el resultado de un proceso largo junto a su entrenador, Agustín Aguilar, con quien trabaja desde hace seis años: “Nos unimos por un sueño: clasificar al kite argentino a un Juego Olímpico”.
Recordó que el Fórmula Kite debutó como disciplina olímpica en París 2024, donde la bahiense representó a Argentina tras lograr una de las 20 plazas disponibles a nivel mundial. “Estoy superorgullosa de haber representado a mi país en un Juego Olímpico y de haber cumplido mi sueño”, afirmó.
Catalina contó que empezó a navegar a los cinco años “en Monte, con mis papás”, un deporte que practicaba en familia y que luego la llevó a entrenar en Paraná y más tarde a competir de manera regular en el circuito europeo.
Sobre el costado económico, fue clara: “La vela es un deporte muy caro”, señaló. Y subrayó que su carrera fue posible gracias al esfuerzo familiar y al apoyo estatal: “Mis papás son el viento que sopla a mi favor”. También agradeció el acompañamiento del ENARD y de la Secretaría de Deportes.
La campeona mundial ya tiene en foco sus próximos desafíos: “Estoy en campaña para los Juegos Panamericanos de Lima 2027 y los Juegos Olímpicos de Los Ángeles”, adelantó. Además, transita sus últimos años en la categoría juvenil mientras compite simultáneamente en eventos de mayores.
A pesar de su agenda cargada entre deporte y universidad, Turienzo intenta buscar algunos momentos de respiro: “Estoy dando todo de mí, pero aprovecho cada momento con mi familia y amigos, que los veo poco”, comentó.
