Cáncer de pulmón: “La detección temprana salva vidas”

El médico oncólogo Dr. Atilio Leone puso el foco en la prevención del cáncer de pulmón, una de las enfermedades oncológicas con mayor incidencia y mortalidad a nivel mundial. En Siete Mundo, el especialista llamó a perderle el miedo al tema y a abordarlo con información clara, haciendo hincapié en el abandono del tabaquismo y en la detección temprana como herramientas clave para reducir el impacto de la enfermedad.

“El factor de riesgo más importante de padecer cáncer de pulmón es el hábito tabáquico”, señaló Leone, al recordar que ya en 1912 se publicó en Estados Unidos el primer trabajo que vinculó directamente los nódulos pulmonares con este tipo de cáncer. En ese marco, aportó cifras contundentes: “Según el último relevamiento de la Organización Mundial de la Salud, al año 2022 se registran más de 2.500.000 casos nuevos por año, y se estima que en los próximos 20 años esa cifra va a ascender a 4.200.000”.

El oncólogo explicó que la principal medida de prevención es clara y directa: “El método de prevención más importante es abandonar el tabaquismo y, en edades tempranas, no iniciarlo, para no tener un riesgo incrementado de padecer cáncer de pulmón”. Además, detalló que existen criterios médicos bien definidos para identificar a la población de mayor riesgo. “Los pacientes de alto riesgo son los mayores de 50 años que han fumado un paquete por día durante aproximadamente 20 años; en ellos es necesario realizar una tomografía de tórax de baja dosis, sin contraste, para detectar lesiones en estadios tempranos”, indicó.

En ese sentido, Leone subrayó la enorme diferencia que hace llegar a tiempo: “Un cáncer de pulmón detectado en estadio uno, con lesiones de un centímetro, tiene una sobrevida a cinco años de más del 83%. En cambio, si se detecta en estadios avanzados o con metástasis, ese porcentaje baja al 7%”. Por eso, insistió en que “es muy importante que esta población pueda acceder a métodos de detección temprana”.

Consultado sobre los síntomas, el especialista fue contundente: “El problema con el cáncer de pulmón es que mucha gente consulta cuando el síntoma está presente, y eso ya habla de un volumen de enfermedad importante, que muchas veces restringe la posibilidad de curación”. Por eso, remarcó que el objetivo es no llegar a esa instancia y reforzó el mensaje preventivo: “Hacer los chequeos anuales y los controles es fundamental, porque la detección temprana salva vidas”.

Leone también destacó los beneficios concretos de dejar de fumar, incluso después de años de consumo. “En pacientes que han sido tabaquistas severos y dejaron de fumar durante un período de diez años, se reduce hasta un 70% la probabilidad de desarrollar cáncer de pulmón, y se incrementa la expectativa de vida en cinco años”, explicó, al tiempo que reiteró que evitar el hábito tabáquico es una decisión que impacta de manera directa en la salud individual y colectiva.

Finalmente, el oncólogo se refirió a la situación actual, especialmente entre los jóvenes. “Hoy no hay propaganda ni incentivo para que la juventud ingrese al mundo del tabaquismo, y eso es positivo. Si bien los casos han disminuido respecto de décadas anteriores, el cáncer de pulmón sigue siendo la enfermedad con mayor cantidad de casos al año y la mayor tasa de mortalidad”, advirtió. Y concluyó con un mensaje claro: “Hay factores de riesgo que podemos prevenir. Elegir si fumamos o no, si hacemos actividad física o si nos alimentamos adecuadamente son decisiones propias que mejoran la calidad de vida de toda la población”.