La justicia dispuso una custodia dinámica para Melisa, la mujer que denunció haber sido violentamente golpeada, abusada sexualmente y agredida con un cutter tras salir de una iglesia evangélica ubicada en Vieytes al 3600, en la tarde noche del domingo pasado.
El hecho conmocionó a los vecinos del sector de Latanzio y Ayacucho, donde Melisa fue encontrada en estado de shock, cerca de un baldío y una obra en construcción. Fue asistida en el lugar por efectivos policiales y trasladada de urgencia al Hospital Municipal, donde permaneció internada hasta recibir el alta médica.
Durante su hospitalización, la víctima logró declarar ante los investigadores. Según su testimonio, además de ser golpeada y abusada, le cortaron el cabello con un cutter, en lo que describió como un ataque planificado y cargado de violencia.
Actualmente se encuentra en su casa, bajo protección policial y acompañada por su familia. La Fiscalía avanza con la investigación y por el momento no hay detenidos.
La familia de Melisa señaló directamente a su expareja, Jonny Zambrano, como posible instigador del ataque, debido a una conflictiva relación previa. Zambrano, por su parte, negó las acusaciones y se presentó espontáneamente ante la Policía para ponerse a disposición de la Justicia.
La causa continúa bajo investigación por la Unidad Fiscal especializada en delitos contra la integridad sexual, que analiza pruebas, testimonios y peritajes forenses.
