La tranquilidad del balneario se vio sacudida en la madrugada del sábado, cuando un incendio destruyó por completo la capilla “Sagrada Familia”, ubicada en el centro de la localidad. Las llamas se extendieron con rapidez y, según testigos, en pocos minutos la estructura quedó envuelta por el fuego.
Laura, vecina del lugar y testigo del siniestro, relató que el fuego avanzó “muy rápido” y que “era prácticamente imposible frenarlo”. Su vivienda se encuentra detrás del complejo de cabañas lindero a la capilla, una zona donde el fuego podría haberse propagado fácilmente. “Escuchaba los sonidos de la madera quemándose, como cuando encendés una leña”, recordó.
El hecho ocurrió durante una madrugada húmeda, lo que, según los vecinos, ayudó a evitar que las llamas alcanzaran los pinos cercanos y las cabañas del entorno. “Las condiciones climáticas fueron clave para que el fuego no se expandiera y causara más daños”, señalaron fuentes del lugar.
Tras el siniestro, la comunidad se movilizó rápidamente. En pocas horas, vecinos y colaboradores limpiaron el terreno, retiraron los escombros y comenzaron a organizar acciones solidarias para reconstruir el templo.
Conmovida por lo ocurrido, Laura reflexionó sobre el impacto del hecho: “Como sociedad tenemos que involucrarnos más, educar en las emociones y entender que nuestras acciones tienen consecuencias”.
