En las últimas horas, Mariana Nannis debutó en Instagram con una actitud desafiante y vengativa. Se creó una cuenta para enfrentar a todos los que la critican y también para hacerle la vida imposible a Sofía Bonelli, la joven novia de su exmarido. La escrachó con imágenes que forman parte de su pasado y hasta dio a entender que la morocha “cobra por sexo”.

En una de las postales, la mediática se burla de la periodista diciéndole “fea”. En otra, comenta que ella es una “travesti”. También compartió una foto donde se ve a una Bonelli adolescente y muy rubia. “CPC (Claudio Paul Caniggia), con esta cara no podés ni cog…”, “Devolvele la plata a los clientes, que 4000 es mucho para vos. Yo si fuera hombre te pago en patacones”, disparó sin piedad en los posteos contra la chica.

Parece que Nannis todavía no pudo asimilar que el padre de sus tres hijos ya encontró un nuevo amor. Semanas atrás, en el programa de Susana Giménez, contó que había vuelto a la Argentina”para salvarlo”. En la extensa charla con la diva de los teléfonos, acusó al Pájaro de ser un adicto a la cocaína, de salir con prostitutas y de ejercer violencia de género sobre ella. Aseguró que él le hizo perder un embarazo -hace 12 años- tras empujarla porque no lo dejó entrar a su casa.

Desde que incursionó en las redes sociales, Mariana no deja de aumentar la polémica que gira en torno a su familia. “A partir de ahora vamos a estar comunicados y van a poder saber toda la verdad. Voy a desmentir todo lo que se dijo de mi por 30 años y subir todas las pruebas. Besos a todos y gracias por el cariño”, escribió dándole la bienvenida a sus seguidores.

También se atrevió a publicar algunos chats con su hijo Axel, quien amenazó con contar “una gran verdad” cuando pise Buenos Aires. El misterio no tardó en revelarse. El joven es padre de una nena de cinco años, fruto de su amor con su mujer -14 años mayor- llamada Nieves. Para desmentir que ella no tiene ningún problema con la criatura, la exmodelo expuso algunas conversaciones con su primogénito, donde le cuenta que fue de comprar y le trajo regalos a Valeria, la pequeña.

Por ahora, la única que se mantiene al margen del escándalo es Charlotte Caniggia, que dijo no estar de ninguno de los dos lados y saber poco de la interna que involucra al clan.

Fuente: tn.com.ar