Soledad Aquino atraviesa una fuerte mejoría en su salud tras las complicaciones de su cuadro por hemorragias digestivas y dos paros cardiorrespiratorios por el trasplante.

La madre de Micaela y Candelaria Tinelli presenta una evolución favorable a tres meses de su internación y está “bajando el nivel de complejidad” del tratamiento, que después de muchas complicaciones ya está en su etapa de kinesiología motora.

Aquino recibió un trasplante de hígado el pasado 10 de junio tras el que sufrió complicaciones que pusieron en peligro su vida y los partes de saludo hablaban de un panorama reservado.

“Luego de superar las hemorragias digestivas que sufrió tras el trasplante que duró más de 6 horas –y en el que incluso presentó dos paros cardiorespiratorios–, Soledad evoluciona favorablemente. El cuadro de salud de la madre de Cande y Mica ‘está bajando el nivel de complejidad’”, informó hoy la revista Gente que tuvo acceso a una fuente en el Sanatorio de la Trinidad donde Soledad lleva adelante su recuperación.

Aquino está mejor de ánimo, según asegura la revista, y “tiene que cumplir un plan de kinesiología motora aconsejado por sus médicos en el que que, según allegados a la familia, tolera muy bien los ejercicios”.

Cande Tinelli se sinceró y habló de la salud de su madre este domingo cuando compartió un escrito que decía: “¿En qué momento de mi vida me volví así? Así de insegura, así de triste, así de solitaria, de confundida…así de rota. Cada persona tiene derecho de crecer segura, confiada y con metas plasmadas, peor yo siento que la vida para mí sólo va de mal en peor. Que salgo de una para ya estar en otra. ¿En qué momento la vida se volvió en mi contra? ¿En qué momento la vida me dio la espalda, dejándome en soledad y con el corazón hecho pedazos? ¿En qué momento de mi niñez comencé a ser así?”. Cerca del final, el texto cerraba diciendo: “Yo sé que ya no soy la misma niñita a la que todos podían herir fácilmente, pero yo siento que me estoy ahogando en la soledad, en la tristeza y en la falta de seguridad. Me estoy preguntando en qué momento dejé de sonreír tan a menudo, en qué momento dejé de ser tan alegre y explosiva. Ojalá pudiera ser menos fría con la gente que amo y empezar a serlo con la gente que se lo merece”.

^{La profunda reflexión de Cande Tinelli en sus redes.}

Notablemente movilizada, Lele comenzó diciendo: “Es algo que no lo escribí, pero lo vi y me gustó mucho me siento muy identificada. Algunas cosas sí, otras no pero no se asusten. Hay mucha gente que me está escribiendo preocupada”.

“No puedo negar que estoy triste porque tengo a mi mamá internada desde hace tres meses. Es una situación muy difícil, que a uno es como que se le detiene el tiempo y la vida sigue pasando, pero para vos el tiempo se detiene ahí y perdés un poco la risa y las ganas de sociabilizar y todo. Sumado a la pandemia, ¿no? Obviamente que me cuido extremamente, porque lo que menos quiero es contagiarla a mamá de Covid”, continuó. 

“También me pone como muy triste todo lo que está pasando en el mundo, lo mal que veo a la gente, el enojo y la angustia que tiene la gente. Todo lo que pasa con los animales, verlos en cautiverio, en el matadero, que nadie haga nada…Es muy desesperante y me parece súper triste el mundo hoy en día”, finalizó con mucha emoción. 

Fuente: Eltrecetv