La milanesa es un plato típico argentino constituido de un filete empanado. Parece simple, pero es una delicia de la gastronomía del país, enamorando no solo a los habitantes sino también a los turistas. Este plato tiene distintas reversiones para comerlo: A caballa, a la napolitana, a la Maryland, a la fugazzeta, con queso, etcétera. Es tan querida por los argentinos que tiene un día propio.
En 2011, un grupo de apasionados por la milanesa armaron una campaña de Facebook para homenajear este comida típica argentina. El día no se eligió por nada especial, simplemente se llevó votación en un grupo de esta red social y quedo instalado el 3 de mayo como el Día Nacional de la Milanesa.
El origen de la milanesa
Aunque hay distintas versiones sobre el origen de este plato argentino, la de mayor relevancia es aquella que dice que surgió en Milán, Italia.
Se dice que en el año 1134, un cocinero local le ofreció a la Corte austríaca este plato por primera vez. A través de un menú de esa época se confirmó que para ese entonces la milanesa ya existía, y la municipalidad de Milán le otorgó a este plato el estatus de patrimonio oficial de la ciudad.
Debido a las sucesivas invasiones austríacas en el norte de Italia en la segunda mitad del siglo XIX se difundió la receta de la milanesa en Viena. Con los años, los inmigrantes de los países europeos llevaron el plato a sus varios destinos, entre ellos la Argentina, donde fue variando hasta llegar a la versión que conocemos hoy.
Fuente: Ambito