Manu Ginóbili volvió a sorprender al mundo. Esta vez, lejos de la camiseta de los Spurs y sin una pelota oficial de la NBA, el bahiense protagonizó un duelo inesperado en Tokio: enfrentarse a un robot de inteligencia artificial en un video de MrBeast, el creador de contenido más visto del planeta.
Con más de 450 millones de suscriptores, el youtuber estadounidense reunió a atletas de elite de distintas disciplinas para someterlos a pruebas diseñadas para medir sus habilidades frente a androides construidos específicamente para superarlos. Y, claro, el básquet no podía faltar.
Ginóbili apareció en escena con una remera celeste que decía “HUMAN”, sonrisa intacta y listo para demostrar que hay destrezas (intuición, improvisación, lectura emocional del juego) que siguen siendo patrimonio exclusivamente humano.

El desafío incluyó ejercicios de reacción, resolución de situaciones reales de partido y tiros de precisión desde múltiples posiciones. Todo envuelto en la clásica estética de MrBeast: luces intensas, cámaras que sobrevuelan la escena, música de tensión y un ritmo diseñado para romper Internet. De hecho, el video ya superó los 25 millones de reproducciones en apenas unos días.

Del otro lado estaba CUE, el robot creado por Toyota que acumula récords insólitos: llegó a encestar 100 de 100, participó en concursos de triples de la liga japonesa y en exhibiciones del All-Star. Equipado con sensores avanzados, motores de ultra precisión y algoritmos entrenados para minimizar el error, se convirtió en un contrincante capaz de encarnar la gran pregunta del experimento: ¿cómo compiten los humanos cuando la perfección se vuelve programable?
Aun así, la propuesta iba más allá del resultado. La intención era mostrar el contraste entre la ejecución milimétrica de una máquina y la naturalidad imprevisible de un deportista del calibre de Manu. Sin embargo, en el duelo directo, CUE terminó imponiéndose.
