Nicolás Pérez Gatti tenía 19 años y trabajaba como repartidor de pizzas en La Plata. En la noche del sábado entregó un pedido y, después de que la clienta cerrara la puerta, le dispararon un tiro en la cabeza, por causas que se investigan. Lo derivaron de urgencia al Hospital San Martín, pero no lograron salvarlo.

El crimen se produjo el sábado a las 22 en la puerta de una casa en el barrio Jardín de La Plata, ubicada en 81 entre 116 y 117. La clienta recibió el pedido, pagó y entró a la vivienda. Instantes después escuchó un fuerte ruido. Volvió a salir y se encontró con el joven herido gravemente, caído en la vereda con la moto encima.

La clienta reportó el hecho al servicio de emergencias 911. Rápidamente llegó un equipo del SAME y trasladó a Gatti al Hospital San Martín, donde murió poco después por la gravedad de las heridas que sufrió por el disparo. La víctima trabajaba en una pizzería ubicada a cuatro cuadras del lugar del crimen.

Los investigadores en principio trabajan sobre la hipótesis de un robo y una posible resistencia de la víctima, ya que en la billetera no le faltaba plata. Por el momento no hay detenidos.

El caso es investigado por la fiscal Ana Medina, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 del Departamento Judicial La Plata, que caratuló la causa como homicidio.