Lorena Gatica contó a Canal Siete su calvario y el de toda su familia, en especial su hija, que siendo muy pequeña fue abusada sexualmente por Jorge Pedro Bergondi, ex-policía, condenado en el 2007, por el Tribunal en lo Criminal Nº 3 a dieciséis años de prisión .

Durante el debate, quedó probado que mientras la abusaba,  la amenazaba con que si iba preso mataría a la familia, y cuando saliese volvería por ella. Los jueces valoraron como agravantes la prolongación en el tiempo de los abusos, habida cuenta que se extendieron en un lapso temporal desde los nueve a los doce años de la menor.

En los últimos días Bergondi fue uno de los beneficiados con arresto domiciliario, producto de la gran cantidad de solicitudes con motivo de evitar la propagación del Covd-19 dentro de las Unidades Penales. Después de aprovechar unos días bajo ese régimen, La Camara Federal revocó, esta mañana, lo decidido en primera instancia y  ordenó que debe volver tras las rejas.

Alivio para la familia, pero quién quita los años de miedo, pesadillas, llamadas “anónimas”, y las decisiones de fueros superiores, que siempre son erróneos para las victimas, porque el calvario lo vivieron en carne propia. Nadie veló por la protección física y psíquica de una víctima, y los fallos no se condicen con lo que se espera.