Una nena de 12 años, que era intensamente buscada desde el martes 26 de enero, fue encontrada este miércoles en General Rodríguez, en la provincia de Buenos Aires, gracias a la denuncia de una vecina. Un joven, de 22, la tenía secuestrada en su casa y se constató que abusó sexualmente de ella.

El hallazgo tuvo lugar en una de las dos viviendas ubicadas en un predio ubicado en la calle Ricardo Balbín y Pueyrredón, del barrio Las Malvinas, en el que vivía esta persona, que era empleado de una pollería de la zona. Se dio luego de una intensa campaña de búsqueda que abarcó publicaciones en las redes sociales, medios de comunicación, y una estrategia “puerta a puerta” para informar a los vecinos, que fueron clave para dar con ella.

La secretaria de Justicia y Seguridad de General Rodríguez Ana Mottino, reveló en diálogo con Télam que la nena estaba privada de su libertad. De acuerdo con el testimonio de la víctima, cuando el joven se iba a trabajar la dejaba “encerrada”. Asimismo, la autoridad municipal indicó que aunque no hubiera sido así, se trata de una menor, de 12 años.

Y aclaró: “Con un adulto influenciando a una niña está clara la opresión que lleva eso, hay una relación de diferencia en cuanto al poder que convierte rápidamente la conducta en sumisión”.

La abogada contó también que el detenido es una persona “conocida del barrio”, que vivía allí desde hacía unos cuatro años y que “tenía esta asiduidad de llevar chicas a su casa, aunque no tan menores”.

Tras rescatar a la chica, el joven de 22 años que vivía en ese lugar fue detenido por los efectivos y quedó a disposición de la fiscal Gabriela Urrutia. Mottino informó que fue indagado el mismo miércoles, tras ser imputado por el delito de “abuso sexual agravado por su comisión con acceso carnal, privación ilegítima de la libertad agravada y sustracción de menores en la modalidad de inducción a la fuga, todo en concurso real”

De acuerdo a la campaña de búsqueda, en la cual estuvo involucrado el ministerio de Mujeres de la provincia de Buenos Aires, la nena había ido a la casa de su abuela en el barrio Villa Ángela. Tras acompañarla al domicilio de una amiga, se escapó y nadie más volvió a verla. “Ya fuimos a todos los lugares donde podría haber ido, nos contactamos con todos con los que podría haber estado. Nadie la vio”, declaró la madre en diálogo con medios locales.