En el marco de una investigación realizada por la UFIJ N.º 18, a cargo del fiscal Gustavo Zorzano, el Tribunal en lo Criminal N.º 2 condenó a Abel Esau Mella a la pena de 3 años de prisión en suspenso por intentar extorsionar a un mecánico de Villarino.

Además, los jueces le impusieron 10 años de inhabilitación para ocupar cargos públicos debido a que se desempeñaba como funcionario policial y reglas de conducta durante el plazo de 3 años.

Según la causa, los hechos ocurrieron en octubre de 2017 en la localidad de Hilario Ascasubi cuando otro policía ingresó a un taller mecánico y le manifestó a propietario que para poder continuar trabajando en su taller debía abonar la suma de 2.000 pesos mensuales que tenía que entregar del 1 al 10 de cada mes, al efectivo Mella y que si no lo hacía sufriría las consecuencias.

El 28 de octubre de 2017, Mella fue al taller y le preguntó al denunciante si había convenido con otro efectivo el monto del dinero que debía abonar ya que -según le indicó- ese dinero se debía rendir “para arriba”. En esta oportunidad, el imputado le advirtió a la víctima que ya habían clausurado un taller.

El día 31 de octubre de 2017 Mella se apersonó nuevamente en el taller y le insistió que debía presentarse a hablar con otro efectivo acerca del dinero que tenía que pagar de manera mensual, le advirtió que cuando tuviera el dinero le avisara y que no lo hiciera a través de llamadas y mensajes, ya que su teléfono se encontraba declarado en el Ministerio de Seguridad y desde allí podrían escuchar la conversación.

Los jueces entendieron que el ilícito quedó plenamente acreditado por las grabaciones y los mensajes de las conversaciones entre Mella y la víctima y el resto de los elementos de prueba que se presentaron en la causa y el debate, que dieron cuenta que el efectivo tenía pleno conocimiento y participaba de la actividad ilícita que se estaba desarrollando.