La conductora hizo lo posible por aguantar las lágrimas ante la descripción del invitado. 

Juana Viale se emocionó en La noche de Mirtha al dialogar con Ezequiel Lo Cane, el papá de Justina. La ley Justina cambió para siempre el enfoque sobre la donación de órganos, ya que ahora la ley dice que desde los 18 años se es donante salvo para el que no está de acuerdo.

“Lo que cambió la Ley Justina es simplificar la donación de órganos, ahora todos somos donantes a menos que digas lo contrario. Desde que la Ley Justina se aprobó aumentaron en un 60% los trasplantes. La otra cosa es que se generaron un montón de procesos ágiles para que se aceleren los recursos para que un trasplante se haga. Por los controles que hay que hacer por COVID aumentaron los tiempos en los procesos, lo que hace que todo sea más lento. El protocolo por COVID hace que el órgano pierda horas -por el test- que hace más complejo todo”, contó el papá de Justina. 

“Estamos trabajando con Inteligencia Artificial para ver cómo esta tecnología puede ayudar en la complejidad de lo que es un trasplante. Se está investigando en cómo replicar células y -rearmar- el órgano para trasplantar a un paciente sin necesidad de un órgano de una persona fallecida. La fortaleza viene de toda la gente que tengo alrededor que me da una energía tremendamente buena”, agregó. 

Ante el crudo relato, Juana Viale se sensibilizó al punto que no pudo contener la emoción: “Es muy fuerte”.

En tanto, Juana Viale brilló en una nueva emisión de La noche de Mirtha. La conductora deslumbró a todos con su vestido y su peinado. Además, reconoció el uso del maquillaje para ocultar un imprevisto: “Justo me salió un herpes”. 

“Un beso a mi abuelita que me está mirando. Es un vestido dorado, hermosísimo con escote halter, y buche en género de red, con mostacillas dorados opacos y falda completamente al cuerpo. Es muy lindo este vestido”, se presentó Juana Viale. Para el maquillaje también la reconoció a su hija Ámbar, su inspiración.  

¿Mamá otra vez?

Juana Viale habló sobre la posibilidad de volver a ser mamá con su actual pareja, Agustín Goldenhorn, durante el programa de Almorzando con Mirtha Legrand del último domingo. 

Todo comenzó cuando Gabriel Oliveri, uno de los invitados a la mesa, le preguntó si tendría más hijos. 

“No lo sé, no sé si puedo también, tuve varios hijos por cesárea, un montón de situaciones complejas de salud, pero estoy abierta al universo siempre”, respondió Juana, quien ya es mamá de Ámbar -fruto de su relación con Juan De Benedictis- y de Alí y Silvestre, que tuvo durante su relación con Gonzalo Valenzuela. 

Además, vale recordar que en 2011 Juana perdió un embarazo cuando se encontraba en la semana 36 de gestación, por lo que le tuvieron que hacer una cesárea de urgencia tras ser diagnosticada con la muerte del feto.

Luego de ello, Juana se refirió a la historia de amor con su novio, quien estaba presente en ese momento en el estudio. 

“Bueno, voy a contar nuestra historia. Fue una cita a ciegas”, comenzó recordando Juana.

“Yo había ido a trabajar a Córdoba y estaba mi mamá y un grupo de amigos comiendo en un restaurante y me dicen si tenés ganas vení a comer. Y yo había llegado a Aeroparque y estaba muy cerca, entonces fui. Y estaba con todos amigos y digo ay, ¿nadie tiene a nadie para presentarme? Y una amiga me dice yo tengo a una persona que te voy a presentar, pero no me muestra foto ni nada”, contó. 

“Pasó un tiempo y recibo un  mensaje que me dice agente x, él no sabía mi nombre y me mandó un mensaje que me encantó. Le digo tengo una hora para que nos tomemos un vino y nos conozcamos. Él no sabía que estaba hablando conmigo, y salgo, me mira y me dice “ah, ¿sos vos?” Y ahí nos fuimos a tomar un vino a un bar malísimo, el peor vino del mundo, y hubo ahí como algo y surgió una magia”, agregó Juana Viale al respecto. 

“Sí, supongo que sí. Él tendría que hablar, a mí me encantaría que vaya a hablar con mi papá”, expresó al ser consultada sobre si le gustaría casarse con Agustín.