Un grupo de padres y madres autoconvocados de Pehuen Co elevó una nota formal a la presidenta del Consejo Escolar de Coronel Rosales, Haydeé Vidal, reclamando soluciones urgentes y duraderas frente a la contaminación del agua en tres establecimientos educativos de la localidad: el Jardín de Infantes N° 915, la Escuela Primaria N° 18 y el anexo de la Escuela de Educación Secundaria Técnica N° 1.
En el escrito, los firmantes manifestaron su “preocupación ante la exposición innecesaria de niños, niñas y adolescentes” a una situación sanitaria que calificaron como “alarmante”. El documento desmiente algunas declaraciones oficiales vertidas en medios de comunicación y detalla con precisión la cronología de los hechos.
Según indican, los análisis de agua se realizaron a mediados de marzo, el consumo por bidones comenzó a mediados de abril, el resultado que confirmó la presencia de Escherichia coli fue entregado el 20 de abril y recién el 9 de mayo los padres fueron informados sobre la bacteria detectada. A su vez, advierten que se siguen registrando casos de gastroenteritis, vómitos y fiebre entre los alumnos, y cuestionan que se continúe usando agua contaminada para el lavado de manos por protocolos vinculados al COVID.
Además, los padres se mostraron escépticos frente a la eficacia del sistema de ósmosis inversa que propone el Consejo Escolar como medida paliativa. “No es la solución”, afirmaron en el comunicado, y propusieron como alternativa la realización de una nueva perforación a mayor profundidad “pasando las napas contaminadas”, basados en consultas con especialistas y en la evidencia de que otras perforaciones cercanas –como la de la sala médica– no presentan problemas de contaminación.
También señalaron sentirse desoídos por las autoridades: “Nos queda la sensación de que, al estar a tan solo 70 km, no pertenecemos a la localidad de Coronel Rosales y no somos escuchados”.
Por último, exigieron la presencia de la presidenta del Consejo Escolar y de personal técnico capacitado en Pehuen Co para mantener una reunión informativa con las familias, y recordaron que la propia Organización Mundial de la Salud define el agua segura como aquella “libre de microorganismos patógenos y sustancias químicas que puedan causar daño a la salud”.