Un adolescente de 14 años murió este domingo en el hospital René Favaloro de Santa Rosa, en La Pampa, adonde había sido trasladado tras ser baleado de forma accidental el viernes al atardecer mientras cazaba con un amigo en la localidad de Jacinto Aráuz, según confirmaron fuentes policiales y allegados a su familia.
El joven, identificado como Benjamín Zaikoski, era oriundo de Abramo y participaba de una salida de caza con un amigo del pueblo.
Ambos utilizaban un arma de aire comprimido calibre 22 cuando, por motivos que la policía mantiene en investigación, Benjamín recibió un disparo en la nuca que quedó alojado en la mandíbula.
Su amigo lo cargó varios metros mientras pedía ayuda. Un vecino que escuchó los gritos constató que el adolescente seguía consciente, pero en estado grave, y pidió asistencia médica y policial.
Tras ser atendido en el lugar, fue derivado al hospital de General Acha y luego trasladado de urgencia al Favaloro, donde finalmente murió.
La investigación y el riesgo de estas armas
La fiscalía ordenó el secuestro del arma y la intervención de la Agencia de Investigación Científica para relevar la escena, tomar huellas y realizar pericias.
Las armas de aire comprimido calibre 22 disparan balines de 5,5 milímetros y se usan para caza menor y tiro recreativo. Aunque no son armas de fuego, su potencia a corta distancia puede provocar lesiones graves o mortales, un riesgo que suele estar subestimado por su bajo nivel de ruido y facilidad de uso.