La temporada de incendios forestales de 2021 a nivel mundial dejó las emisiones estimadas más altas de la historia: unas 1760 megatoneladas de carbono, que equivalen a 6450 megatoneladas de CO2, un 148 % más de lo que emitió la Unión Europea en total de combustibles fósiles en 2020 (2600 megatoneladas). Son datos del Servicio de Monitoreo de la Atmósfera Copernicus (CAMS), el programa de observación de la Tierra de la Unión Europea que desde hace casi dos décadas evalúa el impacto de los incendios en la calidad del aire.
Mark Parrington, científico principal del CAMS, explica por qué se llegó a esta escala inédita:
“Hemos visto extensas regiones que experimentan una intensa y prolongada actividad de incendios forestales. Las condiciones regionales más secas y cálidas bajo un clima cambiante han aumentado el riesgo de inflamabilidad y el riesgo de incendio de la vegetación”.
Según Parrington, esto llevó a que incendios extremadamente grandes y de rápida extensión persistieran durante un largo período de tiempo.
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Esta entrada ha sido publicada el 1 de enero, 2022 12:28
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