En la última media hora de ayer por la noche, los San Antonio Spurs del bahiense Emanuel Ginóbili comenzaron el partido que definía su continuidad en los playoffs de la NBA.
En California, el equipo de Manu enfrentaba en el quinto partido a Golden State Warriors, la serie estaba 1-3 para el equipo del bahiense.
Sólo se podía pensar en un triunfo, para seguir viendo a su equipo en los partidos de post temporada y para seguir con la ilusión de muchos y muchas argentinas, pero principalmente de bahienses que anhelaban ver “una vez más” a Manu en la cancha.
En las estadísticas podrá leer que Golden State Warriors superó ampliamente en la serie de playoffs a San Antonio y que el equipo de Texas terminó perdiendo el último partido 99 a 91. También se podrá leer que uno de los extranjeros más exitosos en la liga Emanuel Ginóbili anotó 10 puntos, 5 rebotes y 7 recuperos en 24 minutos.
Lo que no se verá reflejado en números, es que en medio de un recambio de jugadores – dentro de una franquicia que tuvo un década y media de grande éxitos – un jugador argentino fue elogiado en todos los estadios, reconocido por todos sus colegas y hasta algunos le pidieron que siguiera un año más.
El propio Steve Kerr, entrenador de Golden State Warriors y ex compañero de “Manu”, cuando terminó el partido se animó a decirle
SK – “Seguí probando, por lo menos un año más. ¿Por qué no? Roger Federer me dijo éste año que sigue jugando por que ama el deporte. Si amas lo que haces, seguí adelante, que importa”.
Esta historia de Emanuel Ginóbili en la NBA comenzó ya hace mucho tiempo, más precisamente el 29 de octubre de 2002. Pero nadie, ni el más optimista de la familia Ginóbili, ni el bahiense basquetbolero más soñador pensó en este presente, un hombre de casi 41 años que olvida todas las noches sus dolores para escribir un capítulo más en la historia de la NBA.
Lamentablemente para los fanáticos que piensan en un “Manu” interminable, todos los cierres de temporada aparece el mismo interrogante ¿va a seguir?
¿Cómo es posible? se preguntan algunos.
La respuesta sólo la tiene el jugador argentino más ganador de la NBA. El hombre que durante sus vacaciones se toma un par de semanas para pensar y decidir con su familia acerca de su futuro.
¿Qué pasará ésta vez?
¿Escribirá un nuevo capítulo?
MG: “No soy el tipo de persona que toma un decisión apresurada en un momento de enojo o rabia. Me voy a tomar un par de semana para pensar.”
