“Si me matan, Rosario se incendia”, advirtió Andrés “Pillín” Bracamonte (53), el jefe de la barrabrava de Rosario Central. Tres semanas después que haber dicho esa frase, fue asesinado a balazos a metros de la cancha del Gigante de Arroyito. Su número dos, Daniel “Rana” Attardo, también murió en el ataque.
Bracamonte había dicho estas palabras durante una entrevista, en la que también habló de su intento de asesinato en agosto pasado. “Los Menores se quieren quedar con parte de la ciudad”, sostuvo en referencia a una banda criminal.
“Cuando me dispararon en el parque Alem, Los Monos me ofrecieron hacer una cacería esa misma noche. Me ofrecieron diez autos con gente armada para salir a buscar a los que me habían disparado. Yo los paré porque no quiero volver a la cárcel. Yo soy distinto. Vivo bien, no me drogo, no tomo, no fumo. Tengo todo en blanco. Mi empresa de baños químicos está impecable. Me cuido para vivir una buena vida”, indicó.
De la misma manera, consideró: “Rosario quedó llena de sangre porque son todos unos descerebrados. Todos se creen Pablo Escobar, y están todos presos o enterrados. Nunca entendieron el negocio y se empezaron a matar por el control de dos cuadras. ¿Cuál es el negocio si terminás en el cementerio o en la cárcel, que es lo mismo? Durante mucho tiempo nadie puso un freno a esto”.
“Para estar en esto tenés que ser un pesado, pero eso no quiere decir que te tengas que convertir en un psicópata. Yo me sigo agarrando a trompadas, pero jamás ordenaría que maten a un chico. En Rosario se rompieron códigos que hicieron que todo se vaya a la mierda. Me intentaron matar 29 veces. Esas son la cantidad de cicatrices que tengo en el cuerpo. Todos son balazos”, explicó en una entrevista con La Nación.
Los crímenes ocurrieron después del partido contra San Lorenzo
El ataque contra Bracamonte y Attardo (55) ocurrió en la noche del sábado a varias cuadras del estadio de Rosario Central, en el cruce entre las calles Avellaneda e Ibarlucea. Los sicarios llegaron a pie, les dispararon y escaparon.
Ambos heridos fueron trasladados al hospital Centenario de Rosario, donde ingresaron de urgencia y en grave estado. Unos minutos después, los médicos del centro de salud rosarino confirmaron sus fallecimientos. La autopsia determinó que cada uno tenía cinco orificios de bala.
La primera hipótesis de la investigación, a cargo del fiscal Alejandro Ferlazzo, estaría ligada a un ataque por el control de la barrabrava. Sin embargo, tampoco se descarta que sea un ajuste de cuentas por una disputa narco.
Semanas atrás, “Pillín” había protagonizado otro hecho similar donde lo atacaron a tiros junto a su pareja en el Parque Alem de Rosario. Bracamonte estuvo al frente de la barra de Rosario Central por 25 años y había sufrido 29 atentados contra su vida.
Fuente: TN